Indonesia día 4 y 5: Tres días en barco por Borneo

13-14 de septiembre 2017

Nuestro hotel quedaba a escasos kilómetros del aeropuerto, con lo que en 5 minutos ya estábamos allí. Tras haber visto uno de los mejores amaneceres en el templo de Borobudur, le tocaba el turno a los amaneceres de Borneo. Este día nos levantamos nerviosos porque íbamos a explorar la selva de Borneo en klotok buscando orangutanes. Volamos desde Semarang hasta Pangkalan Bun con la compañía Nam Air (90,95€ dos personas). Nuestro vuelo salió a las 10:00h desde Semarang y tardamos una hora en llegar a Borneo. En el aeropuerto nos esperaba Budy, nuestro guía del tour de tres días en barco por Borneo navegando por parque nacional de Tanjung Puting. 

El trayecto desde el aeropuerto hasta el muelle donde estaba nuestro klotok (un barco de madera) en Kumai, fue de unos 10 minutos.

Conocer Borneo en klotok y buscar orangutanes en libertad nos hacía muchísima ilusión y fue uno de los platos fuertes del viaje. 

Con el problema tan grave que existe con la tala de arboles por el aceite de palma, estos animales están viendo como su habitad se reduce a pasos agigantados.  Fuimos afortunados de poder disfrutar de ellos un ratito. Quién sabe si llegará a ser una especie en extinción. Es una desgracia que no se tomen más medias al respecto. Debemos cuidar el Medio Ambiente, su futuro está en nuestras manos.

Cuando llegamos al puerto de Kumai, lo primero que hicimos fue ir a una instalación con nuestro guía para presentar los pasaportes y así poder identificarnos para poder vivir nuestra aventura de tres días en barco por Borneo. Puedes contratar el tour por la selva de Borneo en klotok para buscar orangutanes in situ (no te aseguramos que haya disponibilidad porque suele ser una activida muy demandada).  Nosotros ya lo traíamos contratado desde España (si quieres contratar tu klotok escríbenos y te lo gestionamos). Los precios por el tour de la selva de Borneo a bordo de un klotok están entre 6.000.000 – 7.000.000. El precio varía según la temporada del año. Nosotros teníamos una oferta vip y nos salió salieron los tres días en barco por Borneo un poco más barato. Tras ese papeleo nos llevaron a conocer nuestro klotok y a su personal.

¿Qué incluye el tour de tres días en barco por Borneo buscando orangutanes?

• Barco privado.
• Traslados desde / hasta el aeropuerto.
• Comidas y bebidas ( no incluías bebidas alcohólicas).
• Guía durante las dos noches y tres días.

Nos subimos al barco y saludamos a la tripulación. Éramos 6 personas; el capitán, el ayudante, la cocinera, Budy y nosotros. Nada más llegar del aeropuerto nos dieron de comer. Aquí ya vimos que la comida prometía, estaba todo riquísimo. ¿Te subes con nosotros a nuestro klotok para buscar orangutanes en libertad? ¡Zarpamos! 

¿Donde contratar un Klotok para dos noches y tres días por Borneo?
Escríbenos por las RRSS o por mail y te daremos presupuesto. ¡Resérvalo con nosotros!

El río en esa altura era muy ancho (a la salida del muelle), pero tras seguir un rato nos desviamos a uno de sus afluentes. En la entrada de la bifurcación del camino vimos una figura en forma de orangután y una señal que ponía Parque Nacional de Tanjun Puting.

Estuvimos recorriendo durante 3 días el río Sekonyer al sur de Borneo. Fue una de las experiencias más bonitas del viaje, ver la selva abrirse camino a bordo de un klotok, es algo que tienes que vivir para poder entendernos. Fue maravillosa y muy reconfortante.

Desde la proa del barco no perdíamos detalle de todo lo que estaba pasando a nuestro alrededor. Estábamos rodeados de vegetación y nuestros ojos no paraban de buscar animales. Acababa de empezar nuestros tres días en Barco por Borneo y ya estábamos completamente enamorados de este sitio. 

A medida que íbamos entrando en la selva el cauce del río se iba estrechando y la vegetación se hacía más densa. Empezamos a escuchar los primeros sonidos de animales, eran monos narigudos. Sentimos esas mariposas en el estómago y estábamos completamente anonadados de lo que estábamos viviendo. Que bonitos! No paraba de decirle a Dani “¡mira!, ¡mira!” (y quiero uno también jaja). La naturaleza nos estaba dando una impresionante bienvenida.

Tras unas horas llegamos a la primera parada del camino, el centro de rehabilitación Tanjung Harapang. Nuestro guía nos avisó para que nos pusiéramos repelente. En esta zona hay miles de mosquitos y como Borneo es un lugar con un riesgo elevado de Malaria teníamos que protegernos. Para todos nuestros viajes llevamos un seguro médico (desde este enlace tendrás un 5% de descuento), no vaya a ser que tengamos la mala suerte de que nos pase algo. Nosotros no jugamos con nuestra salud.

Llegamos un poco más tarde que el resto de los barcos y el espectáculo principal (verlos a todos aparecer) nos lo habíamos perdido. Por allí quedaba un orangután remolón con su bebé hartándose a comer plátanos. Se les daba de comer a las 15:00h. 

Coincidimos de nuevo con nuestros amigos Sonia y John (@elmundoesmejorcontigo), que nos contaron cuantos orangutanes habían visto al llegar. Estuvimos hablando largo y tendido hasta que nos dimos cuenta que éramos los únicos que quedábamos allí, bueno y la orangután remolona.

Emocionados y con ganas de más, pusimos rumbo a nuestros klotoks. Este fue el único campamento que vimos ese día, el resto del tiempo fuimos navegando hasta aproximarnos a los siguientes. 

Para dormir nos acercamos al pantalán de un hotel donde pudimos cargar las cosas. Justo detrás de nosotros estaban de nuevo Sonia y John, que casualidad! El destino quiso que compartiéramos esta increíble experiencia juntos.

A la luz de las velas, con una cena increíble hecha por nuestra cocinera (seguro que se presenta a MasterChef y gana) y el sonido de la selva, saludábamos a la primera noche en Borneo.

Después de gritar un par de veces de barco a barco, decidimos que como habíamos acabado de cenar, los momentos post cena eran mejor vivirlos con amigos. Así que los chicos se vinieron y estuvimos charlando bastante rato. El tiempo se nos pasó súper rápido. Compartimos risas y nos contamos anécdotas de nuestros viajes, pero este no sería nuestro último encuentro para contarnos batallitas.

Estábamos tan cansados de las palizas de los días previos y del vuelo tan temprano, que decidimos irnos a dormir a la hora de los niños, a las 21:00h. Los chicos se fueron a su barco y nosotros empezamos a acondicionar nuestro colchón en la cubierta. Estaba húmedo, aunque mi pareo solucionó ese mal menor. Nos dejamos dormir con el sonido de las cigarras y las peleas de los monos narigudos. Se daban tantas leches entre ellos que a veces se caían al agua. Al principio no sabíamos que ruido era ese, hasta que nos dimos cuenta que eran los monos. ¡Estaban como cabras! Encima cuando caían al agua  el sonido rebotaba fuertemente como si fuera una bomba y nos llevamos unos sustos de miedo.

Con el sonido de los pájaros amanece un nuevo día en el parque nacional Tanjung Puting. Dormir por primera vez en la cubierta de un kolotk al aire libre, fue algo increíble. Escuchamos infinidad de sonidos nuevos, vimos luciérnagas y nos dejamos dormir mecidos por el agua del río. ¡Que experiencia tan diferente, tan chula!

Segundo día en el Parque Nacional de Tanjung Puting buscando orangutanes en la selva de Borneo. Nuestra segunda parada fue en Pondok Tanggui. Como la comida se daba a las 9:00h tuvimos que madrugar de nuevo.

Mientras desayunábamos nuestras tostadas con mermelada, fruta y zumos, íbamos navegando para llegar a la segunda plataforma. Cuando nos íbamos a embadurnar de repelente de mosquitos, Budy nos dijo que en esta zona no hacía falta porque al haber plantas carnívoras no habían mosquitos. La verdad es que no vimos ni sentimos ninguno. Se da de comer a los orangutanes a las 9:00h. 

Allí estábamos otra vez los cuatros contemplando los orangutanes. No habíamos visto nunca ninguno, pero llevábamos dos días que no parábamos de verlos.

Tras pasar por un largo camino de madera, llegamos a la plataforma. Allí nos esperaban otra familia de orangutanes. 

Tras quedarnos un rato observándolos y escuchando como se comunicaban entre ellos, regresamos de nuevo al klotok para poner rumbo a uno de los mejores campamentos del Tanjung Puting.

Una vez subidos al klotok y con fruta en la mesa (pasar hambre, no pasamos) zarpamos de nuevo. Esa zona del río fue nuestra favorita. El camino se estrechaba muchísimo y los árboles se veían reflejados en el agua. El efecto que se formaba era muy bonito. Habían muchos klotok durante el trayecto, pero nuestro capitán guardaba una distancia lo bastante grande como para no verlos. Parecía que estábamos solos en medio de la selva. 

Nos pusimos en la proa del barco a sacarnos fotos y la verdad que el río desde allí se veía muy oscuro. Pensábamos que estaba sucio, pero nuestro guía nos explicó que su color es debido a los sedimentos de la vegetación. ¿Curioso no?

 

Tras navegar durante bastante tiempo y antes de bajarnos en el siguiente campamento, nuestra chef nos tenía puesta la comida en la mesa. Mientras comíamos íbamos apreciando las increíbles vistas del paisaje  y la verdad que no podemos estar más contentos de haber elegido esta aventura.

El tercer y último campamento de nuestra aventura fue el Camp Leakey. Este campamento de rehabilitación ha ayudado  a más de 400 orangutanes y su misión principal es introducir en la vida salvaje a orangutanes huérfanos. 

Lo que mas nos gustó de este campamento, es que en el centro de visitantes había un árbol genealógico de los machos alfas del Camp Leakey. También habían fotos de los orangutanes enfermos con sus cuidadores poniéndoles medicación o vendándoles las patitas. Pobres! esas fotos nos llegaron al corazón. Muchos de estos orangutanes han sido víctimas de malos tratos. ¿Cómo alguien puede hacer daño a los animales? solo tienen un nombre, ¡gentuza!

Tras ver la fotografías y parecernos todos los orangutanes iguales, le preguntamos a una cuidadora como son capaces de identificar quién es quien. Ella nos contestó “que toda/o madre o padre sabe diferenciar a sus hijos” ¿Pero las madres saben identificar bien a los gemelos? que se lo digan a la madre de Dani que los confundía jaja.

Puede que tengas la suerte de cruzarte con algún orangután en tú camino, nosotros por desgracia no la tuvimos. El acercamiento debe ser de manera recíproca y hay que esperar a que el orangután haga el primer movimiento. Si se acerca y te toca, te está iniciando que tu también puedes hacerlo. Muchos amigos nuestros han tenido el privilegio de estar a escasos metros de estos ejemplares. Espero que tú tengas la misma suerte.

No ponemos en parcha siguiendo a nuestro guía.

 

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Tras un pequeño camino llegamos a la zona del food feeding.

Los rangers pusieron la comida en la plataforma y enseguida vinieron muchas hembras con sus crías. También aprovecharon los infiltrados como el gibón, un mono de brazos gigantes con cara de bueno, para robar comida y subir rápido al árbol para no ser visto.

Luego pasó algo súper gracioso. Uno de los orangutanes se quedó casi 10 minutos bebiendo leche sin parar. Fue tan divertido el momento que nos brindó, que no podíamos parar de mirarlo y reírnos.

 

Al rato empezó a suceder algo extraño. Todos comenzaron a subirse a los arboles bastante inquietos y haciendo sonidos entre ellos. De repente … llega Carlos, el enorme e impresionante macho alfa de Camp Leakey. Aunque algo tímido porque se pasó la mayor parte del rato de espaldas a nosotros. ¿Cómo se identifica a un alfa? por las protuberancias de la cara. Cuanto más grandes son, más poder tiene.

Se giró tan solo un segundo de los 10 minutos que llevábamos allí y John, que tenía la cámara preparada, pudo inmortalizar ese momento.

Habíamos escuchado que Tom era el alfa del Camp Leakey, por eso cuando llegó Carlos no lo entendimos muy bien. Tom, había destronado a su padre tras una gran pelea y al parecer había luchado por el trono con su hermano Carlos. Nos dijeron que hacía semanas que no lo veían, con lo que creían que tras la pelea por el reino podría haber muerto. Que pena!

Foto de Carlos sacada por los chicos de @elmundoesmejorcontigo

Contentos con lo que habíamos vuelto a vivir y con una buena sensación con este campamento, nos fuimos haciendo un pequeño trekking.

Budy, nuestro guía

A mitad del camino nos empezó a llover. Menos mal que ya habíamos visto el último campamento y no nos influyó en nuestra visita.

El paraguas improvisado de Sonia y John

Nos despedimos de los chicos con un hasta luego y nos subimos en nuestro klotok. Volvimos a atracar en el mismo pantalán del primer día para cargar toda la tecnología. Se había acabado nuestra aventura de tres días en Barco por Borneo buscando orangutanes salvajes. La experiencia en klotot por la selva de Borneo fue mágica y maravillosa, sin duda repetiríamos. 

 

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Si estas buscando un barco para hacer un tour buscando orangutanes por la selva de Borneo contacta con nosotros. 

 

Último día en Borneo

En el siguiente post “el sexto día en Indonesia” (nuestra ruta por Indonesia) explicamos cómo llegamos a Kumai en nuestro último día en Borneo y cómo llegamos hasta Cemoro Lawang, el pueblo del volcán Bromo. 

 

Resumen de nuestros tres días en barco por Borneo

• Primer día: Tanjung Harapang.
• Segundo día: Pondok Tanggui y Camp Leakey.
• Tercer día: Regreso a Kumai a primera hora.

 

¿Se puede hacer la visita de otra manera? El tiempo de viaje ideal para poder pararte en cada estación y disfrutar de estos animales, son tres días y dos noches. Pero si solo se dispone de un día, la mejor opción es llegar al Camp Leakey (el mejor de todos) con una lancha rápida desde Kumai. Se tarda aproximadamente unas cuatro horas.

¿Qué opinamos sobre esta aventura? El vivir en un Klotok en medio de la selva es una autentica experiencia. Como aspecto negativo (tampoco muy negativo), es que pensábamos que el contacto del humano con los orangutanes era mínimo y nos dimos cuenta de que no es así. El ser avisados por los rangers de “la comida está en la mesa” no deja de ser un espectáculo creado para el turista. No quiero compararlo con un zoológico porque no existen barreras que los priven de su libertad, pero me lo imaginaba de otra manera, mas natural y no con tanto contacto. Aunque lo que nos gusta saber es que todos los ejemplares están bien cuidados y los trabajadores velan por la seguridad de todos ellos. En su conjunto global es una experiencia idílica. 

¿Nos tomamos las Malarone durante nuestra visita de tres días en barco por Borneo? No. Nosotros no nos tomamos las pastillas para la Malaria, pero nos las llevamos por si contraíamos la enfermedad. Con esto no queremos decir que no se las tomen, cada uno es libre de tomar su decisión. Nosotros en este caso y debido a los fuertes efectos adversos, decidimos usarlas sólo en caso de contagio hasta llegar al hospital más próximo. De todas maneras, siempre viajamos con un buen seguro de viajes. Después de probar varios, encontramos Mondo y desde hace unas cuantas aventuras es nuestro aliado. Algo que nos gusta a parte de su calidad de poliza – precio, es que si tienes cualquier duda o problema, tienen una atención telefónica o vía WhatsApp 24 horas. Contratando tú seguro de viajes a través de nuestro enlace, tienes un 5% de descuento aquí.

¿Qué les ha parecido nuestra experiencia en barco por la selva de Borneo? ¿Les han entrado ganas de hacer una aventura como la nuestra? Hasta la siguiente aventura viajeros!

 

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